Lacrimosa, luminoso lamento surgido de la oscuridad

*Teatralidad, melancolía y una fidelidad inquebrantable a su estética gótica. Así fue la presentación de Lacrimosa en el C4 Concert House el pasado viernes 13 de junio

Algo innegable cuando se trata de Lacrimosa, una de las grandes exponentes de metal gótico, es que su virtuosismo luce en cualquier escenario, pero entre más íntimo sea, es mucho mejor. Han visitado varias veces la ciudad, siempre con una nutrida convocatoria un éxito que no mengúa, pero en esta ocasión, hicieron una escala en el C4 Concert House, un recinto que acaba de cumplir su primer año de vida, pero ya tiene en su haber algunas grandes estrellas.

La banda alemana estuvo de visita en Guadalajara como parte de su Lament Tour 2025, con la producción de ACK Promote y reunió a cientos de seguidores vestidos de negro, algunos con maquillajes y vestuarios impresionantemente elaborados, otros sólo con camisetas de la banda y otros como cualquier civil, pero eso sí, todos listos para rendirles un nuevo tributo.

Luego de haber calentado motores con Evercloud, la banda telonera, en punto de las 21:00 h, de entre una penumbra ligeramente irrumpida por el logo de la banda en el fondo, apareció Anne Nurmi, seguida de Henrik Flyman, Sebastian Hausmann y finalmente, Tilo Wolf, con cuya presencia la energía del auditorio terminó por desbordarse, creando la atmósfera perfecta para que “Avalon” arrancara con potencia el encuentro de esa noche.

Haciendo gala de su prodigiosa destreza instrumental, así como sus ámplios registros de voz, la noche transcurrió a través de un intenso desfile de éxitos, un público entregando hasta el alma en cada acorde, y una banda manteniendo una estrecha cercanía no sólo en lo emotivo. “Der Morgen danach”, “Liebe über Leben”, “Celebrate the Drakness” y “Allen zu zweit” sonaron con una fuerza tan estremecedora que refrendaron su vigencia y contagiaron hasta al espectador con menos expectativas. Les siguieron “Ich verlasse heut´ dein Herz”, “Schakal”, “Dark Is This Night”, “Not Every Pain Hurts y “Du bist alles was ich will”; a estas alturas, el C4 ensordecía por un coro multitudinario cantando en un accidentado alemán. En el lado opuesto al escenario, un aficionado abrazaba afectuosamente a dos desconocidos, como si fueran sus amigos de toda la vida, ante la emoción desbordada de escuchar, por primera vez en su vida, un tema de la banda en vivo.

¨Lament”, “Rote Sinfonie”, “Daughter of Coldness”, “Durch Nacht und Flut” y “Memoria”, comenzaron a sentenciar el final del concierto, no así del entusiasmo generalizado que exigió a la banda regresar al escenario. El encore estuvo conformado por la infaltable “Lichtgestalt”, y “Punk & Pomerol”; pero el público pedía con insistencia “Copycat”, así que regresaron con “Ich bin der brennende Komet” y, finalmente, presentada por Tilo Wolff con una sonrisa plena de complicidad, la de quien sabe que por fin acabará con una larga expectativa, vino la aclamada “Copycat”, para cerrar la oscura y lluviosa noche tapatía de manera definitiva.

Lacrimosa dejó evidencia de su irrompible preferencia entre los tapatíos y refrendó su capacidad para combinar oscuridad con belleza, dolor con elegancia, y nostalgia con fuerza, dejando en los asistentes experiencias inolvidables y profundamente emocionales.

Cobertura por Luis Gómez Sandi «Lags» | IG lagsfotograma (te puedes robar el tag del evento de milky chance)

Presentado por Ocesa