Desde que en 1984 Rudyard Kipling publicara The Jungle Book (El libro de la selva) se han realizado un gran número de interpretaciones, pero sin duda la versión cinematrográfica animada que realizó los estudios Disney en el año 1967 marcó a muchas generaciones.

Una de las características que marcó al publico en nuestro país fue el doblaje realizado por artistas que se encontraban en auje en esos momentos como Germán Valdés «Tin Tan» haciendo la voz del oso Baloo, Luis Manuel Pelayo con la voz de Bagheera o Alfonso Aráu interpretando la voz de Kaa, además de pegajosas melodías que aún los que recordamos esa cinta podemos tararear. Para esta nueva versión se contó con las voces de Héctor Bonilla (Baloo), Enrique Rocha (Bagheera) Víctor Trujillo como Shere Khan; Susana Zabaleta como Kaa; Regina Orozco como Raksha y Francisco Céspedes como Rey Louie, sin duda es un gran elenco sin mencionar las voces en inglés.

Para esta ocasión Walt Disney Pictures asigno al actor y director Jon Favreau (Ironman, Los Vengadores, G Force) el realizar la versión Live Action de esta historia por demás conocida. Favreau seleccionó al talentoso niño de 12 años Neel Sethi para interpretar el papel de Mowgli y todos los demás personajes con la técnica de animación computarizada.

Ahora bien tras esta larga introducción y después de haber visto la cinta en 3D podemos denotar los puntos a favor de la cinta, como la excelente actuación de Seith como Mowgli, ya que si consideramos que la actuación en sí es un arte difícil de interpretar, imaginen el hacerlo en un cuarto verde con animales, paisajes y escenarios simulados, sobre todo en un niño de 12 años, creemos que si fue sorprendente.

La animación tanto en texturas como en forma y movimiento de los demás personajes es muy real, detallista y casi perfecta, sin embargo el empleo del 3D no fue tan sorprendente, excepto en los créditos finales en los que se aprecia mejor.

Si bien Favreau ha obtenido grandes éxitos con las cintas de superhéroes, creemos que hay algo en los que nunca nos deja totalmente satisfechos, pero sin duda ha obtenido excelentes críticas por esta cinta alrededor del mundo.

Así que en términos generales EL LIBRO DE LA SELVA nos gustó, a pesar de que no creemos que tenga el mismo impacto que su antecesora de 1967. Esta versión totalmente dirigida al público infantil, y a pesar de que se alejaron la parte musical, no pudo pasar por alto uno de los temas característicos de la cinta: «Busca lo más vital«.

Recomendada para verse en familia y los grandes añoraremos la antigua versión pero las nuevas generaciones podrán divertirse con los personajes nuevos. Y pues esperemos una segunda entrega a ver que pasa.